Si hay una frase que sintetice la informática es la que da título a este artículo.
"Entrada, proceso y salida" es un modelo básico que describe el flujo de información y las funciones de un sistema o proceso. Este modelo es aplicable a diversos campos, como informática, programación, ingeniería de sistemas y gestión de procesos. Cada componente del modelo tiene un propósito específico:
1. Entrada (Input): La entrada se refiere a los datos o información que se suministran al sistema o proceso para ser procesados. Las entradas pueden provenir de diversas fuentes, como usuarios, otros sistemas o sensores. Estos datos pueden ser números, texto, imágenes, audio, entre otros.
2. Proceso (Process): El proceso es la etapa en la que se realizan las operaciones y transformaciones en los datos de entrada. Estas operaciones pueden ser cálculos matemáticos, análisis de datos, filtrado, clasificación, almacenamiento, etc. El objetivo del proceso es convertir los datos de entrada en información útil y significativa.
3. Salida (Output): La salida es el resultado del proceso, que generalmente es información procesada y transformada a partir de los datos de entrada. Las salidas pueden ser informes, gráficos, decisiones, alertas, entre otros. Estos resultados son utilizados por usuarios, otros sistemas o procesos para tomar decisiones, realizar acciones o para ser almacenados y analizados en el futuro.
El modelo "entrada, proceso y salida" es una herramienta útil para comprender y describir el flujo de información y las funciones de un sistema o proceso, lo que facilita el análisis, diseño y optimización de sistemas y procesos en diversos campos.
Entrada Proceso Salida en aplicaciones empresariales
Cualquier mega-aplicación, por grande que sea, se descompone en módulos, que a su vez se descomponen en unidades menores hasta llegar a los procesos y funciones.
Los procesos, funciones, triggers y demás partículas de código son las que a priori nos resultan más sencillas de visualizar como elementos que tiene una entrada, un proceso con la información de entrada y una salida.
Si hacemos una abstracción mayor, podemos ver como incluso los procesos tienen unidades atómicas inferiores que también tienen entrada-proceso-salida, esos elementos son las líneas de proceso.
Cada línea de proceso en “Velneo” se comporta como un proceso completo y dispone de un origen (entrada), comando de instrucción (proceso) y destino (salida).
Si hacemos otra abstracción podemos llegar a entender que realmente todos los objetos tienen entrada-proceso-salida.
Cualquier formulario recibe un registro (entrada) que visualiza o edita (proceso) y que devuelve (salida) para su actualización en la base de datos. De la misma forma, una rejilla es un objeto que recibe una lista de registros (origen) que se visualizan, editan, filtran, … (proceso) y que devuelve la lista de registros (salida).
Al igual que ocurre con las líneas de código, que son las unidades más pequeñas con (entrada), (proceso) y (salida), en Velneo tenemos objetos que amalgaman a otros objetos aplicando el mismo concepto de encadenamiento.
De esta forma un objeto tiene una entrada que procesa y la salida de este objeto se convierte a su vez en la entrada del siguiente. Al objeto que gestiona esta cadena de objetos se le denomina Acción y gracias a su versatilidad y a que se programa visualmente ha convertido la programación con Velneo V7 en algo realmente sencillo.
En resumen, podemos definir una aplicación como el conjunto de código que mediante la encadenación de diferentes entradas-procesos-salidas automatiza la gestión de la información.