Cómo desarrollar software sin programar código

Desarrollar software sin programar código es posible gracias a la existencia de herramientas conocidas como plataformas de desarrollo de aplicaciones sin código (no-code). Estas herramientas permiten a los usuarios crear aplicaciones mediante una interfaz gráfica de usuario en lugar de tener que escribir código.

¿Desarrollar software sin programar? Puede parecer una propuesta extraña, pero no debemos olvidar que este es el blog de una plataforma de desarrollo, que no de programación.

Es decir, que el propósito de la plataforma es ayudarnos y asistirnos en el desarrollo de software en forma de aplicaciones de gestión, programas verticales y horizontales, herramientas puntuales, incluso apps móviles, lo cual no quiere decir que sea necesaria ni imprescindible la programación de código fuente, no al menos en todos los casos, ni de manera obligatoria.

Para que podamos tener una perspectiva más amplia y clara de qué es desarrollar y qué es programar, en qué se diferencian y cuáles son las virtudes y desventajas de cada una de ellas, vamos a repasar los principales paradigmas, términos y procedimientos relacionados con el mundo del desarrollo y programación de software.

Una de las muchas interfaces de usuario que vimos en la película Oblivion.

¿Qué es un software?

Llamamos software al conjunto de operaciones, instrucciones y reglas informáticas necesarias para ejecutar, determinar tareas en un ordenador. Existen multitud de tipos de software disponibles, pero aquí hablamos principalmente de los softwares de gestión, es decir, aquellos concebidos especialmente para cubrir las necesidades de gestión que tienen las empresas y los profesionales.

¿Qué es programar o programación de código?

Idear y definir las acciones necesarias (operaciones, instrucciones y reglas) para ejecutar determinadas tareas, normalmente procesamiento de datos.

Imprescindible si deseas aprender a programar: Guía indispensable para ser un buen analista-programador.

¿Qué es desarrollar software?

Si atendemos a la definición académica más amplia del término “desarrollar”, nos encontramos que consiste en “realizar o llevar a cabo algo”.

Es decir, que si llevamos esta definición estrictamente al desarrollo de software, podemos concluir que desarrollar software consiste en realizar o llevar a cabo un software. Parece evidente, pero lo que quiero resaltar es que el término desarrollar software, no condiciona la manera en que alcanzamos dicha realización o consecución, es decir, que no implica necesariamente la necesidad de programar para poder desarrollar un software.

No dejes de leer cómo convertirse en un desarrollador de software completo.

¿Qué es programar software?

A diferencia de como veíamos en el punto anterior, programar software consiste en la realización o consecución de un software, haciendo uso de códigos de programación, por lo que sí que implica la necesidad de utilizar uno (o varios) lenguajes de programación para ello.Por cierto, no confundir programar software con software de programación ;)

No te pierdas nuestra razones para ser programador de software y cómo podemos programar software a nivel profesional.

¿Cual es la diferencia entre desarrollar software y programar software?

Una vez que hemos definido qué es un software y qué es programar, así como en qué consiste el desarrollo de software y la programación de software, creo que queda claro que la principal diferencia entre desarrollar y programar un software es que cuando hablamos de desarrollo no implica necesariamente la utilización y conocimientos detallados de códigos de programación, mientras que cuando nos referimos a programación de software sí lleva implícito la necesidad de escribir código.Y esto nos lleva a la siguiente pregunta:

¿Se puede desarrollar software sin (saber) programar código?

¡Aprende a crear programas para windows sin saber programar!

Mentiríamos si, tras todo lo explicado anteriormente dijéramos que no es posible. Pero vamos a profundizar un poco con ejemplos, para intentar que quede más claro. Hoy en día existen multitud de plataformas y herramientas que nos permiten desarrollar software de manera visual, utilizando el ratón para ello, juntando piezas y bloques y seleccionando campos y comportamientos en función a una lógica, como si de un Lego se tratara, todo ello sin necesidad de programar código alguno.

Eso no quita que, debajo de todas esos movimientos que realizamos con el ratón, la plataforma esté convirtiendo esas acciones en código, que a fin de cuentas es lo que entienden y procesan los ordenadores. Pero lo hace la herramienta, se encarga de traducir nuestras simples acciones y conexiones en código fuente.Un ejemplo más cercano para todos es cuando pulsamos una tecla de nuestro teclado.

Si estamos en un editor de texto, dicha letra aparecerá reflejada en la pantalla, lo cual parece muy evidente si no lo pensamos, pero si meditamos un poco acerca de cómo se lleva a cabo dicha acción, podemos darnos cuenta que al pulsar dicha tecla, lo que por debajo está ocurriendo es que el teclado envía un pulso eléctrico a nuestro ordenador, que mediante un controlador lo procesa y ejecutando diversas operaciones determina dibuja dicho símbolo en la pantalla de nuestro editor.

Imaginad si cada vez que quisiéramos dibujar un símbolo en un edito de texto, tuviéramos que programar el controlador del teclado para que se imprimiera en pantalla el mismo. Sería una locura, precisamente por eso, la informática nos permite ir encapsulando todas esas órdenes y funciones para que no sea necesario repetirlas una y otra vez.Y retomando el tema inicial, el mundo del desarrollo de software ha seguido también este camino, englobando y abstrayendo cada vez más y más funciones y procedimientos, para que no sea necesario repetirlos una y otra vez.

Es por ello que multitud de operaciones muy comunes en la mayoría de aplicaciones de gestión empresarial, como podrían ser entidades, tablas, listados, fichas o detalles de dichas entidades, operaciones matemáticas, agrupamientos, informes, así como distintos tipos de interactuar, añadir, modificar, eliminar y visualizar dicha información se han estandarizado, permitiendo que la gestión de las operativas se realice de manera visual, sin necesidad de tener que programar cada una de ellas a medida.

Entonces ¿hoy en día solo existen entornos de programación y plataformas de desarrollo en los que no es necesario programar código? Bueno, como casi todo en la vida hoy día, entre ambas opciones hoy disponemos de un amplio abanico de soluciones entre esas dos opciones.

Existen entornos de programación de bajo nivel, es los que solo podremos desarrollar las aplicaciones mediante la utilización de código fuente, muchas veces en compañía de la utilización de bases de datos, pasando por diversas plataformas que van integrando más y más asistentes visuales y programáticos que nos permiten llegar a los mismos resultados, pero que igualmente permiten profundizar en el comportamiento de nuestra arquitectura o diseño, profundizando en el código fuente de los elementos que hemos creado, pudiendo pasar de desarrollo visual a código fuente y viceversa.

Estas plataformas se dividen entre:

  • Full Code: entornos de desarrollo integrado (IDE) que solo admiten código fuente como pueden ser Eclipse, Atom, IntelliJ IDEA, WebStorm, PyCharm o Komodo, entre otros.
  • Low Code: plataformas que combinan el desarrollo visual con la posibilidad de personalizar el código fuente como es el caso de Velneo, FileMaker, Appian, Caspio, Mendix, Zoho Creator por mencionar algunos.
  • No Code: herramientas que nos permiten desarrollar software sin permitirnos escribir una sola línea de código fuente aquí tiene cabida desde Appy Pie, Nintex, Zudy o Shopify hasta otras menos específicas como Google Spreadsheets, AirTable, Integromat o WordPress, entre muchas otras.

Gigantes como Microsoft, Google, Apple, SAP, Oracle o Salesforce disponen de diversas herramientas que pueden encajar en las tres categorías.

Plataformas Low Code: Equilibrio entre eficiencia, personalización y rentabilidad en el desarrollo de software.

Como hemos ido desgranando, a la hora de desarrollar un software podemos tomar diferentes caminos, a través de diferentes aproximaciones e incluso poniendo en práctica distintos paradigmas.

Ahora, si nos preguntamos cuál podría ser el punto intermedio entre conseguir una aplicación eficiente: es decir, que cumpla con nuestros propósitos de manera apropiada, personalizable, que nos permita definir de manera específica nuestras necesidades e integraciones necesarias y rentable, que ello no nos lleve por el camino de la amargura en lo que a tiempos de desarrollo y coste del proyecto se refiere.

Las plataformas lowcode –de poco código, en una traducción muy literal– son las que más se ajustan a estas características, pues están a medio camino entre esos IDEs que requerirán de un completo despliegue de arquitectura y código y nos brindan más opciones de personalización e integración que las herramientas en las que no podremos escribir código.

Recomendaciones para desarrollar software sin programar código

A continuación, se presentan algunas recomendaciones para desarrollar software sin programar código:

  1. Identifica la necesidad: Antes de comenzar a utilizar una herramienta sin código, es importante tener claro cuál es la necesidad que se quiere resolver con la aplicación que se va a desarrollar.
  2. Seleccione la plataforma adecuada: Existen varias plataformas de desarrollo sin código disponibles en el mercado, cada una con sus propias características y limitaciones. Es importante seleccionar la que mejor se adapte a las necesidades de la aplicación que se quiere desarrollar.
  3. Familiarizarse con la plataforma: Es importante conocer en profundidad la plataforma que se va a utilizar, para aprovechar al máximo todas las funcionalidades que ofrece.
  4. Diseñe la aplicación: Una vez que se conoce la plataforma, se puede comenzar a diseñar la aplicación, es decir, definir su estructura, funciones y diseño visual.
  5. Prueba y ajusta: Después de diseñar la aplicación, es importante probarla para detectar posibles errores o áreas de mejora. Las herramientas sin código suelen ofrecer herramientas de prueba para hacer esto más fácil.
  6. Implemente la aplicación: Una vez que la aplicación ha sido diseñada y probada, se puede implementar en producción. Las herramientas sin código suelen ofrecer formas sencillas de hacer esto.
  7. Mantenimiento y actualización: Como cualquier software, las aplicaciones sin código requieren mantenimiento y actualización. Es importante asegurarse de que la aplicación esté siempre actualizada y funcione correctamente.

En resumen, para desarrollar software sin programar código es necesario conocer las herramientas disponibles, diseñar la aplicación adecuada y realizar pruebas para garantizar su correcto funcionamiento. Hemos escrito algunos artículos muy completos para que conozcas y te adentren en el mundo de las plataformas low-code:


David Gutierrez
16/12/2022
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